25 de febrero, 2022

«El día 19 de febrero del 2022, hemos compartido con gozo, en forma presencial y virtual, la profesión perpetua de la Hna. Ma. Guadalupe Galeano da Costa que se celebró en la Capilla del Colegio Teresiano de Asunción y fue transmitida virtualmente vía zoom y a través de las redes de la Provincia. Gracias a estos medios, hermanas de diferentes comunidades pudieron unirse para acompañar a Guada y compartir con ella durante los momentos previos al inicio de la Eucaristía.

La Eucaristía fue presidida por el padre Cristian Gatica, sci, y concelebrada por los padres Carlos de la Cruz, sj y Gilberto González, ocd; también estuvo presente el diácono Richard Acosta. El coro formado por exalumnas, profesoras y prenovicias animó con canciones que expresaban bellamente las vivencias de la hermana Guadalupe. El lema elegido para la celebración, “Busco tu rostro”, fue la expresión de la búsqueda constante de la voluntad de Dios desde que inició su proceso vocacional hace diez años con el deseo de ser fiel al plan de Dios para con ella.

Este día, estuvieron presentes hermanas de las distintas comunidades del Paraguay, sus padres, hermanos y hermanas, sobrinos, exalumnas, profesores, miembros de la familia teresiana, religiosas de otras congregaciones… Todas compartieron la alegría y el gozo por poder acompañar y vivir con Guada este acontecimiento tan importante y emotivo, donde ella, públicamente, expresó su deseo de “mantener viva la memoria de Jesús”.

El Padre dio la bienvenida a todos los presentes: “Con mucha alegría queremos celebrar y compartir esta Eucaristía, una Eucaristía muy importante para Guada donde todos los que la conocemos queremos compartir esa alegría de este “ Sí” al proyecto de Dios en su vida, en esa búsqueda constante del rostro de Jesús.”

Luego del Acto Penitencial, se escucharon las lecturas seleccionadas por Guadalupe, la primera del Cantar de los Cantares, el Salmo 17 cantado y por último el Coloquio de Amor de Santa Teresa. El Padre proclamó el evangelio de San Juan que relata el encuentro de María Magdalena con el resucitado. Seguidamente la Hna. Ángeles Muñiz, Coordinadora provincial, le preguntó a María Guadalupe; “Después de estos años de haber compartido el seguimiento de Jesús en la Compañía ¿Qué pides en este momento de tu vida?” Guada con mucha emoción respondió: “Pido seguir a Jesús en la Compañía de Santa Teresa de Jesús, entregando todo lo que soy, quiero participar de su misión evangelizadora viviendo en comunidad su experiencia de obediencia, pobreza y castidad para siempre”.

Luego de las primeras preguntas, el Padre Cristian pronunció la homilía, y la inició comentando una hermosa coincidencia: él conoció a Guada recién llegado de Chile, y ella está ahora a punto de partir a esas mismas tierras. Recorriendo los textos elegidos y recordando varios momentos de la vida consagrada de Guada, fue destacando ese punto común: una búsqueda intensa, profunda y auténtica del rostro de Dios y con ello el deseo profundo de cumplir su voluntad.

Finalizada la homilía, continuó el diálogo con la hermana provincial, en donde se fue ahondando en el sentido de los consejos evangélicos; a todo ello Guadalupe iba respondiendo “Si quiero” con un rostro radiante y alegre.

Antes de iniciar el canto de las Letanía de todos los Santos, Guada  se acercó a sus padres para recibir su bendición, como símbolo de pedir a quien se respeta y ama, que sea intermediario de la protección y amparo de Dios. Finalmente ante la presencia de la Hna. Ángeles y las hermanas Ma. Beatriz Ortigoza y Rosa Elena Cálcena como testigos, y ante todos los presentes, la Hna. Guadalupe pronunció la fórmula de la profesión perpetua:

“Yo, María Guadalupe de Teresa de Jesús Galeano Da Costa , te entrego libre y totalmente mi vida y hago voto de obediencia, pobreza y castidad para siempre, según las constituciones de la Compañía de Santa Teresa de Jesús. Quiero compartir con esta familia el don del carisma teresiano y fortalecer los lazos de comunión y pertenencia al servicio del Reino. Acojo tu espíritu que animó el caminar de María y José, de Teresa de Jesús y de Enrique de Ossó y que sigue actuando hoy en nuestra historia…Sé que tu amor y tu gracia completarán tu obra en mí. Amén . ”

La Hermana Ángeles Muñiz, aceptó su “sí” en nombre de la Iglesia y de la Compañía y tras ello se escuchó el bello canto “yo me entrego a tí”, cuya letra es de la Beata Chiquitung. La Hna. Guadalupe recibió un anillo como signo de su profesión y alianza con Jesús, y el abrazo de todas las hermanas teresianas fue la manifestación gozosa de que la Compañía siempre será el lugar para vivir el seguimiento de Jesús, y su entrega al Reino.

Al final de la Eucaristía la hermana Guadalupe expresó su “Acción de Gracias” en la que fue realizando un recorrido por su vida, agradeciendo tanto desborde de amor de Dios, “amor al que solo puedo responder amando», expresó. Seguidamente destacó: “Esta celebración ha sido un signo externo de tanto vivido en estos 10 años en los que empecé una búsqueda profunda de su voluntad para mi vida, por dentro el Señor ha hecho grandes cosas, la mayoría de ellas inefables, por eso en cada música, gesto y texto de esta celebración había una pequeña ventana para asomarse a ello, por eso quiero agradecer a quienes hicieron posible vivir esta celebración de esta manera tan honda y significativa”

Al concluir la ceremonia se compartió un brindis en el “Salón de Actos” del Colegio, donde todos expresaron la belleza de lo vivido esta tarde.

“El Señor ha estado grande con nosotras y estamos alegres”.